Un poema de Luis Rangel
Un ave extranjera
cantó mil himnos al sol
pensando que estaba
en su tierra;
el sol era el mismo.
*
Las aves
no necesitan puentes
para atravesar
fronteras;
algo les deberíamos
aprender
*
El ave
quiso cantar
lejos de su tierra
y temió no ser
apreciada
por los lugareños.
No sabía que su canto
es el idioma
original.
*
Cuatro aves
paradas en el muro
fronterizo
vieron una parvada
de aviones
cruzar el cielo.
Estudiante de la Licenciatura en Letras Españolas en la Universidad Autónoma de Chihuahua y miembro del comité organizador del Encuentro Nacional de Escritores Jóvenes Jesús Gardea. Autor de Hotel Sputnik (Tintanueva, 2016), ha publicado textos en diversas revistas como Tierra Adentro, Metamorfosis, Himen, Hybris, entre otras. Fue becario del noveno curso de creación para jóvenes de la Fundación para las Letras Mexicanas. Actualmente es miembro del taller de poesía “Alí Chumacero” coordinado por Enrique Servín.